
De
su antigüedad y poblamientos hablan los numerosos restos hallados en sus
cercanías. Hachas, lascas, piedras labradas y utensilios. Vaso neolítico de
la Cueva Santa, Cabeza de Toro y Cierva arrodillada (yacimiento de
Capuchinos) ambas del periodo ibérico: tres piezas estimables expuestas en
el Museo Arqueológico Provincial. Y la Dama de Caudete en el Museo de
Villena.Por su emplazamiento
geográfico ha sido paso y punto de diferentes pueblos. Formó parte de
Tartessos, conoció a los fenicios y le dejaron su huella los romanos con la
Vía Augusta que cruzaba su término y la Vía Pretoria y luego cuando el reino
de Tecemir al que pertenecía hubo acabado, fue árabe durante algunos siglos.
Conquistado por los almogávares de D. Jaime
I el Conquistador que llegaron al mando del comendador de Alcañiz en 1240,
pasa a Castilla en 1244 a raíz del tratado de Almizra. En este tiempo estuvo
bajo el dominio de las Ordenes Militares de Calatrava y de Santiago. En
1304, tras el pacto de Agreda ratificado entre el rey de Aragón Jaime II y
Fernando IV de Castilla vuelve a ser de Aragón figurando en el reino de
Valencia. En 1429, fue arrebatado por Juan II de Castilla a Alfonso V de
Aragón a quien fue devuelto en 1436. Caudete figuró en el Reino de Valencia
como una de las 29 villas reales con voto en sus Cortes. Todavía conserva de
su larga estancia en estos reinos, costumbres y apellidos y en su habla el
tono peculiar del diminutivo ico. Pueblo fronterizo con una personalidad un
tanto independiente asume una rica y variada herencia cultural. Con motivo
de la guerra de Sucesión en 1707 fue ocupado por las tropas inglesas que
apoyaban al pretendiente Carlos de Austria. Con el triunfo de Felipe V
pierde sus fueros y privilegios recobrándolos en 1738, gracias a un
sacerdote ejemplar, D. Luis Golf. En esta fecha queda incorporado en el
reino de Murcia. En la guerra de la Independencia sirvió de centro de
operaciones, residencia y cuartel general del mariscal francés Suchet. En
1833 con la nueva distribución territorial, Javier de Burgos, lo incluye en
la provincia de Albacete. También le afectaron algunos enfrentamientos de
partidas carlistas y tropas reales, en las guerras del pasado siglo. En lo
eclesiástico perteneció a la diócesis de Cartagena hasta 1565, de aquí hasta
1949 a la de Orihuela y en la actualidad a la de Albacete.
Desde 1978, con la llegada de la
democracia, se vuelve a recomponer el mapa autonómico español. Caudete, con
el resto de la provincia de Albacete, se integra en la recién nacida
Comunidad de Castilla-La Mancha.
HERÁLDICA
El escudo de Caudete tiene por armas
un castillo con tres torres y sobre ellas las cuatro sangrientas
barras de Aragón; encima de éstas una corona real; en el centro dos
llaves atravesadas; a los lados dos estrellas y a los de las torres y
castillo dos alas de paloma, y debajo de |
 |
cada una de
ellas las letras C y D. Aparte de otros privilegios y mercedes,
franqueza de derechos reales, etc., tenía jurisdicción en sí y sobre
sí, civil y criminal de mero y mixto imperio. Ostenta el título de
Real, muy Noble, muy Leal y Fidelísima Villa. |
EDIFICIOS
HISTÓRICOS

Parroquia de Santa Catalina. Amplia y con muestras del gótico y del
renacimiento. Maestro de la torre, cuadrada, con cinco campanas, Juan Vilar,
principios del siglo XVI. Su media naranja data de mitad del siglo XVIII.


Parroquia de San Francisco. Iglesia panteón del conde de San Carlos y de su
esposa la baronesa de Caix. Guarda un solideo de San Pío X y tiene pinturas
de P. Torres Cotarelo. Fue construida a principios de siglo y destaca su
cúpula en forma de bulbo.

Convento de PP. Carmelitas Calzados. Siglo
XVI con claustro del siglo XVII con fuente central y bellas y sencillas
arcadas.



Basílica de Ntra. Sra. de Gracia. Construida
(1741-1758) sobre otra más antigua. Su estilo greco romano del orden
compuesto con cúpula de linterna. Tiene pinturas de Agustín Espí, Rodríguez
San Clemente y Perezgil. Y una tabla antigua anónima que representa a San
Martín.



Las ermitas de San Antón, Santa Ana (antes
San Cristóbal) ya existían en el siglo XVI.

La plaza de toros, con fama de
ser una de las más bonitas de España fue construida en 1910. Ha sido
restaurada recientemente.


Casa de la Villa. Encuadrando
la plaza Mayor. Con arcos y vistosa balconada, escudo de piedra y reloj de
sol.


Antiguo palacio episcopal. Siglo XVII.
Presenta una bella portada con balcón y una sala con azulejos valencianos
llena de motivos marítimos.


Murallas
antiguas. Parte de un castillo árabe que defendía la población; uno de sus
últimos alcaides fue D. Pedro Quintana. Hay memoria de otra fortaleza en la
cumbre de Santa Ana con cuatro torreones y murallas dobles.
8II


Del 6 al 10 de septiembre celebra sus fiestas
patronales de Moros y Cristianos, declaradas de interés turístico regional y
nacional que constituyen una serie de cuadros medievales con ruedos de
banderas, juego exclusivamente caudetano, volantes (pajes) con su encanto
infantil, su bastoncillo y su rodela y sus atronadores disparos de
arcabucería. Durante tres tardes se representan en la plaza Mayor los
Episodios Caudetanos – la Invasión, la Reconquista y la Expulsión y
Aparición de Ntra. Sra. de Gracia y de San Blas – obra en la que participa
el pueblo. Todo en relación con el descubrimiento en 1414 de dichas imágenes
en el Partido de los Santos. Fiestas cargadas de música, bellas como un
códice viejo.


Otras
fiestas son los Bailes del Niño pura alegría loando el natalicio del Señor.
Ocurren en las plazas públicas. Parejas que se presentan lindamente
ataviadas y que bailan delante del Niño (imagen atribuida a Roque López,
discípulo de Salcillo) en la misa de 1º de año y durante la procesión
general. Repiques de castañuelas al son de alegres jotas; diversión
interesante con el galanteo del bailador y el donaire de la bailadora.
Bailes a la puja la llana, en el teatro por la noche, con la intervención
de un mayordomo voceando posturas.
La Pascua de Resurrección
comprende tres días con excursiones campestres donde se come la «mona» y
danza y ríe la juventud. Jolgorio repetido en la octava y el lunes
inmediato, día de San Vicente. Festividad que viene celebrándose en Caudete
desde que la instituyera en 1594 Clemente VIII.
Las fiestas de San Antón y San Blas recogen un
hondo sabor gremial y de barrio con sus hogueras, sus rollos bendecidos, sus
rifas y sus juegos populares al aire libre.
GASTRONOMIA
Platos usuales son la paella de
pollo, pelotas de relleno (pan, carne picada, piñones y sangre) sopas de
menudencias, arroz con caldo de verduras, gachamiga, cocido de gallina con
morcilla de puchero y tocino y gazpachos, echados sobre la tierna torta y
mezclados con trozos de conejo o pollo, «tropezones». De pastas,
almendrados, machacos, tortas de aguardiente y de carnaval y algunas más
sacadas de recetas tradicionales; monas, pan dormido y de aceite para el
tiempo de pascua. De vinos tinto y blanco, locales, de buen sabor y grado

Convento
del Carmen de Caudete
ESTE
ES EL CONVENTO DE CAUDETE 